Siempre he sido muy fan de las fotos. Creo que son un recuerdo precioso que nos ayuda a recordar. Nuestra cabeza almacena momentos pero a veces no somos capaces de recordarlo todo, por eso me gusta hacer y tener fotos. Porque me ayudan a recordar cosas que mi mente había dejado en un segundo plano, recuerdos que creía olvidados pero que ellas, las fotos, me hacen recordar y revivir.
Siempre he hecho muchas fotos, cuando era una niña con las cámaras analógicas y con las de “usar y tirar” que me llevaba de campamentos. Con ambas había que gestionar y elegir muy bien el momento en el que apretar el botón, ¡cómo han cambiado las cosas!. Luego llegaron las cámaras digitales (la primera que tuve funcionaba con pilas), después la réflex, y por último los teléfonos móviles, con los que tirar fotos hasta hartarse.
Como veis y como os decía, muy fan de las fotos desde siempre y con la llegada de Olivia, mi afición se ha multiplicado. Me encanta tener imágenes de cada momento, de cada sonrisa, de cada recuerdo. Así que cuando me llegó la oportunidad de realizar una sesión de fotos gracias a @pausellesmakeup, de la mano de @limalimonfotografos fue un subidón total. Iba a tener un recuerdo precioso que además me iba a encantar porque había visto algunos trabajos de Ruth de Limalimón y no me podían gustar más.
Así que nos cogimos las maletas y nos fuimos a pasar un par de días a Elche donde nos reunimos con Ruth para hacer la sesión. Ella se encargó de buscar un sitio precioso donde poder hacer las fotos, y eligió el momento ideal para que la luz, el sol y todos los factores que entraban en juego fuesen los ideales para conseguir el mejor resultado. ¿Sabéis esa sensación de cuando ves a alguien trabajar y piensas: “le apasiona su trabajo”? Pues eso fue lo que viví, porque está claro que ella ha nacido para hacer lo que hace, para tratar con niños, para crear recuerdos, para narrar historias bonitas y fotografiar momentos.
El resultado de aquella sesión llegó a penas una semana después y el resultado, como ya preveía, me encantó. Fotos naturales, bonitas, que transmiten el amor, la felicidad y la esencia de lo que somos como familia. Las sonrisas de Olivia inundan las fotos, a pesar de que la pobre llevaba unos días un poco reguleros con los dientes y su carácter de permanente alegría habitual estaba un poco decaído. Lo dicho, un resultado genial de manos de una súper profesional.
Y como es muy fácil hablar pero lo importante es demostrar, os dejo algunas de mis favoritas para que vosotras mismas podáis opinar. ¿Os gustan tantísimo como a mi?
